El arroz que desde siempre se ha preparado en Sevilla ha sido el caldoso o el "meloso" dependiendo del almidón que le hallamos dejado al arroz. Un clásico es el arroz con carabineros que al igual que las galeras eran mariscos baratos, poco menos que para hacer caldos. Desde hace dos décadas los precios de unos y de otras se han disparado convirtiendo el arroz con carbineros en un lujo. A mí, para acrecentar este lujo, me gusta presentarlo con el marisco limpio, solo para meter la cuchara y comer y no tener necesidad de pringarse los dedos para aprovechar el marisco.
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